jueves, 17 de junio de 2010


Por motivos ajenos a mi voluntad (o no tan ajenos) Doy por clausurado indefinidamente este blog para dedicarme a un proyecto super super secreto que sólo sabe Paula. Au Revoir! L.

sábado, 15 de mayo de 2010

Alice


Alice Crown bajó las escaleras de su piso uno a uno en silencio. Su estado era antisocial y taciturno, no deseaba que nadie, nadie, le molestara. Apagó su móvil y lo metió en su buzón, lo último que quería eran llamadas indeseadas. Al salir a la calle notó como un frío repentino la atravesaba, pero no le importó lo más mínimo. El lugar a donde iba estaba cerca. Sin ganas de tener que encontrarse con nadie se puso la capucha de su sudadera gris y, subiéndose los pantalones (estúpidos cinturones demasiado grandes) hechó a andar. Siempre había creído en el amor. El amor era lo que guiaba su vida, su motor, su carbón para que fuera la máquina que era su cuerpo, todo lo que necesitaba era amor y lo había encontrado muchas veces en la vida, pero esta vez era diferente. Se sentía como si le hubiera arrollado un camión, como si le hubieran picado cientos de tábanos, como si una enorme horca le hubiera robado el oxígeno de un estirón. Alice Crown llegó a su destino sin tropezarse con nadie. Entró, hizo lo que tenía que hacer y salió. Ahora sólo le faltaba hacer las maletas.

jueves, 15 de abril de 2010

431 words


It was just a disgusting afternoon of that disgusting summer.

It seemed that this day everyone had roast their complexes, because most men were shirtless and women showed off their legs in short skirts. I passed the tavern of that tiny town and everyone looked at me. Surely most do not think anything, this is the life of village people, they just watch people go by while they will spin the straw of their coke.

I waited at the bus stop until it finally appeared in the distance. The driver should not see me because almost bypasses, he only stopped when I sat in the middle of the road. I went, I paid and went straight to the door. I kept listening to music until the bus stopped at the next stop. I did not even realize, I think I had my eyes closed, but the first thing that made me raise my head blow was that smell. I slowly turned my neck, hoping that it was a mistake. Could not be him, not here, but yes, was he, and continued as usual. His bright white shoes barely touched the ground while he was walking, their plain jeans so narrow showed a thin legs. He wore a purple short-sleeved polo and a white shirt underneath. I was surprised at the detail that he was not wearing his backpack brand but a bandoleer, but neither that, nor his bracelets, nor his two wooden necklaces mattered after I looked at his eyes. I felt the world disappear under my feet, that people disappeared, and started to sound that song of the 80s, our song. I'm sure he did not realize it was me until he was leaning on the seat nex to me, then it was too late, because he looked at me with those big green eyes, and I wished to stop the earthquake that had formed in my head. He swallowed me, he dragged me into the abyss of her eyes enveloping me with that melody that had cost me so much to forget. I tried to speak, but my lips seems to were on strike, so I just looked at him. It was the 12 minutes and fourteen seconds much longer of my life. Finally I went down, before him, and when the bus began to pull again I could feel a slight smile coming out of her perfect face, dazzling and golden, like sunlight. It has been a love so fleeting ...

Although it was not really so important. It was just a disgusting afternoon of that disgusting summer.


Foto - Tarde de aburrimiento.

Podeis leer la versión en español pulsando aquí

Y disfrutar más de la lectura escuchando esto

viernes, 2 de abril de 2010

miércoles, 10 de marzo de 2010

The saltwater room

I opened my eyes last night and saw you in the low light
Walking down by the bay, on the shore, staring up at the planes that aren't there anymore
I was feeling the night grow old and you were looking so cold
Like an introvert, I drew my over shirt
Around my arms and began to shiver violently before
You happened to look and see the tunnels all around me
Running into the dark underground
All the subways around create a great sound
To my motion fatigue... farewell
With your ear to a seashell
You can hear the waves in underwater caves
As if you actually were inside a saltwater room

Time together is just never quite enough
When you and I are alone, I've never felt so at home
What will it take to make or break this hint of love?
We need time, only time
When we're apart whatever are you thinking of?
If this is what I call home, why does it feel so alone?
So tell me darling, do you wish we'd fall in love?
All the time, all the time

Can you believe that the crew has gone and wouldn't let me sign on?
All my islands have sunk in the deep, so I can hardly relax or even oversleep
I feel as if I were home some nights when we count all the ship lights
I guess I'll never know why sparrows love the snow
We'll turn off all of the lights and set this ballroom aglow

Owl City.

lunes, 8 de marzo de 2010

Quiéreme si te atreves.


Felicidad en estado puro, brutal, natural, volcánico, que gozada, era lo mejor del mundo... Mejor que la droga, mejor que la heroína, mejor que la coca, chutes, porros, hachís, rallas, petas, hierba, marihuana, cannabis, canutos, anfetas, tripis, ácidos, lsd ,éxtasis... Mejor que el sexo, que una felación, que un 69, que una orgía, una paja, el sexo tántrico, el kamasutra, las bolas chinas... Mejor que la nocilla y los batidos de plátano... Mejor que la trilogía de George Lucas, que la serie completa de los Teleñecos, que el fin del Milenium... Mejor que los andares de Ally Mcbeal, Marilyn, la Pitufina, Lara Croft, Naomi Campbell y el lunar de Cindy Crawford... Mejor que el pequeño paso de Amstrong sobre la Luna, el Space Mountain, Papa Noel, la fortuna de Bill Gates, las malas experiencias cercanas a la muerte, la resurrección de Lázaro, todos los chutes de testosterona de Schwarzenegger, el colágenos de los labios de Pamela Anderson, mejor que los excesos de Morrinson... Mejor que la libertad... Mejor que la vida.

martes, 2 de marzo de 2010


y YO
, a tres metros sobre el suelo.

lunes, 1 de marzo de 2010


Lunes, 1 de Marzo de 2010♥
Lunes, 1 de Marzo, diecinueve meses contigo.

domingo, 14 de febrero de 2010

MTV winter. Sábado, 13F.


Final apoteósico. 11:46

Arctic Monkeys. 22:55 pm


Mystery Jets. 22:08 pm.


Oceanográfico.
19:37 pm.







lunes, 8 de febrero de 2010


Escribiste tu número en mi mano, pero con la lluvia se me borró.

jueves, 28 de enero de 2010

Y no me sonrojo, si te digo que te quiero...
Habías sido, sin dudarlo la más bella, de entre todas las estrellas que yo vi en el firmamento...

lunes, 25 de enero de 2010

Tiempo de Fiesta

Un Poni, una China y un Hamster-Ruso
Paula Cubells, Lidiah-ah Martí, Ana Forment, Isaaq Miquel, Erika Daries y Juan Miguel Almarcha
Paula Cubells, Pau González, Lidiah-ah Martí, Juan Miguel Almarcha y Ana Forment.
Ana Forment, Lidiah-ah Martí, Paula Cubells y Erika Daries.





Tan sólo es por publicar algo más en Enero.
Feliz día.

viernes, 1 de enero de 2010

Feliz 2010!


If there's somebody calling me on

He's the one.

domingo, 27 de diciembre de 2009

El mar y su madre.


La brisa marina movía mi pelo y mi vestido como si quisiera que me adentrara en el mar, y la verdad es que tal vez esa fuera la mejor decisión que podría tomar.
Mirando el horizonte empecé a pensar en todo lo que me había perdido hasta ese momento, que no había sido poco. Parecía que mi vida había estado sujeta a las decisiones de los demás todo el tiempo, me sentía una marioneta dominada por unos hombres con traje.
De repente, un sonido y un coche que aparca.
Se apagan los faros y ni me molesto en girarme para ver quien es. Es él. Ha sido él siempre, por mucho que me haya querido vendar los ojos.


Las olas me mojan los pies. El mar está frio pero no me importa. Me hace sentir viva.
Cuando oigo sus pasos me doy la vuelta. Aun no puede verme, pero estoy llorando.
Me toca la cara y se sobresalta al ver las lágrimas que se derraman por mis mejillas.
No le digo nada, y él tampoco. Simplemente nos fundimos en un furtivo abrazo. Esta situación me está matando. Quiero decirle todo lo que le quiero, pero tan solo pronunciar su nombre sería admitir que todo es cierto. Que vivo engañada, como en un cuento irreal de los que siempre acaban bien.

Él se decide a hablar primero, y sus palabras me hielan la sangre, son puñaladas que se graban a fuego en mi corazón.
- Te amo, y sé que prefieres estar conmigo antes que con él. Nos estás matando a los dos, y sabes que esta situación no puede seguir así mucho más tiempo.
Hago un ademán de zafarme de sus brazos, pero él me aprisiona más fuerte.
- Quédate conmigo Karen. Quédate conmigo siempre.
Pensé que después de eso iba a desmayarme, pero me descubrí tirada en la arena besándole, acaricíandole y fundiendome con él en esa noche de Abril.


Después de leer eso Beth se metió en el coche y fumó un cigarrillo. Después arrancó y fue a la residencia donde estaba su madre. La envidió por haber querido tanto a su padre, y se apenó por ella porque ya no lo recordaría jamás. O tal vez sí, pero una cosa era clara, ella no lo sabría nunca.

domingo, 20 de diciembre de 2009

Correo de Ron.


'De repente se despertó. Abrió los ojos y vió dos focos enormes y brillantes. Luego, dos sobras borrosas la miraron y le taparon la boca con algo. En cuanto aspiró, notó que esas sensación de mareo iba aumentando cada vez más, hasta que se quedó dormida...'


Querida Lilly:

Te escribo porque el hielo ha congelado los cables del teléfono y no tengo otra forma de comunicarme contigo. Espero que recibas esta carta, de todas formas, intentaré ir mañana al pueblo de al lado para ver si ellos tienen linea.

Amanda está hoy más hermosa que nunca. Está tumbada en la cama, durmiendo tranquilamente, y ningún pensamiento la molesta. Su rostro es sereno, blanco y brillante, como una muñequita de porcelana y tiene los labios cerrados, como los de la Mona Lisa.
Su pelo negro rizado le cae hasta bajo del pecho, y un mechón le tapa el ojo derecho y sus espesas e infinitas pestañas.

En las manos lleva mi pañuelo rojo.
Dicen los médicos que no lo ha soltado en toda la operación.

Aunque los médicos también dicen que tiene esperanzas, pero yo sé que es una falacia para darnos falsos ánimos. Amanda tiene cáncer, y va a morir.
Hace dos meses, cuando se lo detectaron, aun podía albergar alguna esperanza, pero esta es la tercera operación, y no mejora.
Si los médicos no ven una clara evolución tendrán que proceder a la quimioterapia. Y entonces, conforme su espeso y ondulado pelo vaya cayendo le absorberán toda esa energía que tiene, su hiperactividad de niña pequeña, su preciosa sonrisa de media luna... No puedo soportarlo. Y tampoco puedo consentirlo, así que si te escribo esta carta es para decirte que nos vamos.
Mañana mismo me la llevaré a la casa del lago de mi tio Agus, y pasaremos juntos sus últimos días.

La amo, y no puedo soportar que lo único que vean sus maravillosos ojos antes de cerrarlos por última vez sea un aparcamiento feo y gris.
Espero que me comprendas. Tú harías lo mismo si estuvieras en mi situación.

Con los mejores deseos:
Ronald.

viernes, 18 de diciembre de 2009

Queridos reyes magos, como este año no he sido buena, no espero que me traigais la mayoría de cosas que os voy a pedir, pero como normalmente sí que me lo traeis las pediré igualmente:

- Me encantaría que Lucy se decidiera a escribir algo, estar recluida en un manicomio no es bueno si no tienes nadie con quien hablar.
- Quiero que Venus vuelva.
- Me encantaría que Amanda venciera el cáncer, y que Ron me enviara una carta contándole como les va todo en la caseta.
- Podría ser que Alice se centrara un poco? Siempre me he preguntado si es una ninfómana reprimida.
- Podríais traerme la medicación de Penelope? Ahora está en uno de sus periodos de exaltación, pero la Navidad suele sacar lo peor de ella.
- Si no es mucho pedir, Jannete y Kate podrían dar la cara...
- También quiero el diario de Lola
- Sería feliz si Sophie encontrara por fin ese amor al que tanto se ha cerrado.
- Sé que no hay forma de curar a la madre de Beth, pero ella podría leerle el diario, a lo Diario de Noa, por ver si tiene el mismo efecto.


También quiero una cámara de fotos nueva. Pero eso es subjetivo. Sólo quiero intentar ayudarlas.


Este año he puesto el Belén para reblandeceros un poco el corazón.
Espero que me ayudeis.
Buen viaje!

viernes, 11 de diciembre de 2009

Sophie II



Se agachó un poco para entrar mejor, y cuando la miró Sophie pensó que la acababan de atravesar. No creía en el amor a primera vista, pero nunca había conocido a una persona tan curiosa como ella, y, desde luego, esos ojos no eran normales.
Su pelo era corto, rubio, difícil de definir, pero tan fácil de acariciar...
Llevaba una chaqueta marrón, gorda (hacía mucho frío) y unos vaqueros rectos oscuros.

Pronto se dio cuenta de que probablemente no tendrían nada en común, pero tampoco era algo que le importara. De todas formas, no tenía pensado hablar con él.

Se levantó para quitar el portátil de la cama, con tan mala fortuna que se dio un coscorrón enorme, tan grande que se volvió a caer en la cama.

El chico apareció instantáneamente a su lado, y la cogió del brazo suavemente. Cuando se tocaron, Sophie notó que su piel tenía un tacto menos cálido de lo normal, ¿húmedo

- ¿Te encuentras bien? – Le preguntó

- Hem, sí. No, me duele la cabeza – dijo Sophie con lágrimas en los ojos.

- Tranquila, voy a pedirle hielo a la camarera

- No, no te molestes, no hace… - pero ya se había ido.

En lo que para Sophie fueron dos segundos el chico ya estaba en la habitación de nuevo, con una bolsa azul en la mano izquierda y cerrando el compartimento con la derecha.

- Espera, no te muevas – le dijo mientras se acercaba a la cama y le ponía el hielo en la cabeza – lo último que necesitas ahora es marearte y volverte a caer. Tranquila, soy una especie de médico, sé de lo que hablo.

- Podrías decirme tu nombre, para poderte dar las gracias como es debido.

El chico sonrió. Sus dientes eran perfectos.

- Mi nombre es David, David Black.

- Pues muchas gracias David Black. Por tu culpa casi me abro la cabeza, pero gracias a ti no me ha pasado nada más grave. Mi nombre es Sophie Evans.

- Sé que va a sonar extraño e incluso puede que un poco cursi, pero cuando he entrado he tenido la sensación de que ya nos conocíamos, ¿Nos habíamos visto en alguna otra parte?

‘¿Este macizo se ha fijado en mi antes y no me había dado cuenta?’ Pensó entonces Soph.

- Me parece que no. Supongo que me habría acordado de ti - ¿Cómo? – Tengo memoria fotográfica.

- Interesante y sin embargo, desconcertante. Desde que estoy hablando contigo ya he tenido dos deya vu.

jueves, 10 de diciembre de 2009



- Como es tu mujer ideal?
- Podria describirla durante toda la noche, lo que no sé es si yo puedo ser su hombre ideal.

miércoles, 9 de diciembre de 2009

Alice II


- No soy especial

- No eres especial, tienes razón, pero eres el tipo de persona que hace a uno sentirse diferente, especial

- No necesito a una persona para sentirme especial

- Pues entonces, es que estoy enamorada...



Después de leerlo se metió en la cama y empezó a soñar.

A la mañana siguiente, después de apagar el despertador lo volvió a leer.

Más tarde se preparó para ir al instituto y antes de irse, lo volvió a hacer.

Ella era despreocupada, alegre e infantil. Lista y amiga de sus amigos. Detallista, amable con los desconocidos (cosa que alguna que otra vez le había traído algún problemilla) Despreocupada, servicial y ante todo una bohemia.

Creía en el amor por encima de todo. Si se enamoraba, lo gritaba a los cuatro vientos. Si le rompían el corazón nunca se rendía.

‘Todo lo que necesitas es amor’ era lo que tenía tatuado en el brazo izquierdo. En honor a los Beatles y a un viejo amor.



Se sentía bien con la luz del sol quemándole la cara.

martes, 8 de diciembre de 2009


¡Ten cuidao con la luna! - dicen las estrellas.
Más guapa que ninguna, me quedo con ella.

He loves the way she sings.

lunes, 7 de diciembre de 2009

Amanecer en Gerona.